¿Qué neumáticos duran más, los de verano o los de invierno?

¿Qué neumáticos duran más, los de verano o los de invierno?
Imagen de un coche en carretera
¿Qué neumáticos duran más, los de verano o los de invierno?

Juan Antonio Fonseca Serrano.- Cada cierto tiempo, los conductores tienen que pasar por la revisión y renovación de los neumáticos de sus vehículos. Muchos acuden a lugares como 1001neumaticos.es para ver qué modelos comprar y cuáles instalar en sus coches, aunque, en los últimos años, se ha visto cierta tendencia a usar más neumáticos de verano que de invierno a lo largo del año. ¿Por qué? 

Hay muchos factores que invitan a esto, aunque el más claro es la durabilidad, no obstante hay quienes piensan que todo se debe a la confusión y mucho mito urbano, porque se suele creer que los neumáticos de verano duran más que los de invierno. ¿Es eso cierto? Vamos a resolver la gran duda de muchos conductores, sobre todo de los que menos tiempo llevan al volante, para que tengas claro cuál te conviene más comprar y por qué. 

¿Cuáles son los neumáticos más duraderos? 

La primera pregunta es clara, ¿qué diferencia hay entre un neumático de invierno y uno de verano? La respuesta, también lo es. Su composición y diseño están pensados para soportar mejor las estaciones que les dan nombre. Se han construido pensando en aguantar las temperaturas y fenómenos meteorológicos propios del invierno, o los del verano. Aunque, dada la situación climática que se da en España, no es tan necesario cambiar entre unos y otros. 

¿Por qué? Porque, por más que llueva y por mucho frío que haga, España no es un país frío. Salvo en lugares excepcionales situados en las zonas más altas de nuestra geografía, las temperaturas nunca suelen alcanzar extremos tan bajos como para que sea totalmente necesario apostar por los neumáticos de invierno. Es más, la mayoría de la población de concentra en zonas donde lo habitual es que las temperaturas sean más cálidas a lo largo de todo el año. 

Debido a esto, es lógico que se compren más neumáticos de verano que de invierno, ya que son los que mejor encajan con las condiciones atmosféricas y ambientales de la mayor parte del país. Los neumáticos de invierno tienen un desgaste muy bajo cuando los termómetros oscilan en torno a los 10 grados centígrados, sin embargo, su desgaste se dispara cuando la temperatura empieza a subir. Eso con los neumáticos de verano no sucede, ya que suelen estar pensados para trabajar a temperaturas en torno a los 25 grados centígrados. 

Se puede decir que las ruedas de verano son más duraderas que las de invierno, pero no porque estén mejor construidas o usen materiales mejores, sino porque, simplemente, son las más adecuadas para el clima de este país. Si se tratara de una región colocada a mucha altura sobre el nivel del mar, con grandes nevadas y en la que la mayor parte del tiempo haga un frío bastante contundente, entonces ocurriría justo lo contrario, sería recomendable y hasta necesario apostar por las gomas de invierno. 

Diferencias entre neumáticos de invierno y verano, en cifras 

Hemos hablado del desgaste como el factor clave para decidirse, la cuestión es que esto va ligado también al rendimiento de la rueda. Cuanto más desgastada está, menor es su adherencia a la superficie con la que entra en contacto mientras el coche se mueve y eso, a su vez, hace que el peligro sea mayor para el conductor y todos los pasajeros. La mejor forma de entender esto es con cifras y datos, así que vamos a darte un ejemplo que seguramente te ayudará a terminar de captar la gran diferencia entre ambos tipos de rueda. 

Imagina una carretera seca. Imagina ahora que estás circulando a 100 kilómetros por hora y tienes que dar un frenazo en seco porque un obstáculo se cruza en tu camino. Con una temperatura de 10 grados, un neumático de invierno necesitará recorrer poco más de 50 metros para que el coche se detenga por completo (un coche de tamaño y peso medio). Con una temperatura de 25 grados, la distancia se eleva hasta rozar los 60 metros de frenada. ¿Y con un neumático de verano? En ese margen de temperaturas, mantiene una media de poco más de 35 metros de frenada. 

A medida que sube la temperatura, peor es el rendimiento del neumático de invierno, cosa que no sucede con las ruedas de verano. En caso de carretera mojada, la frenada del neumático de invierno sí es mejor en temperaturas bajas, pero empeora considerablemente en casos de temperaturas altas. Donde se nota la diferencia de forma más palpable, es en el caso de que haya una carretera en la que ha nevado. Ahí, con una media de 40 km por hora, un neumático de invierno puede detenerse en menos de 30 metros, mientras que uno de verano necesita el doble de distancia. 

Sin duda, las cifras son claras, sobre todo teniendo en cuenta las condiciones meteorológicas de España. El neumático de verano es más recomendable.