Conducción autónoma en logística: Al volante del futuro
Redacción.- ¿Cómo será el futuro de la movilidad? ¿Sostenible, seguro y tal vez incluso autónomo? La digitalización y la automatización de procesos asociada han estado cambiando industrias enteras durante años.
La industria automotriz podría estar al borde de la próxima gran agitación. Pero antes de que los coches se conduzcan de forma autónoma, los camiones probablemente serán los primeros en hacerlo.
Camiones de conducción autónoma
La idea básica detrás de la conducción autónoma es bastante simple: en lugar de que los humanos aceleren, frenen y dirijan, el vehículo lo hace por sí mismo. Lo que significa que el conductor se convierte en un mero pasajero y puede dedicarse a otras cosas mientras está en la carretera: leer, trabajar o simplemente cerrar los ojos. Para el conductor, la conducción autónoma es principalmente un medio para una mayor comodidad. Al mismo tiempo, aumenta la seguridad porque una computadora comete menos errores que un humano y tiene un tiempo de reacción significativamente más corto, los cuales pueden marcar la diferencia en el momento decisivo.
Camiones autónomos en Alemania
La conducción autónoma podría convertirse en un verdadero cambio de juego en la logística: cuando se trata de camiones, no solo significa una reducción en la carga de trabajo del conductor, sino que incluso puede implicar que ya no se necesita un conductor. En la actualidad, se aplican normas estrictas a los conductores de camiones, prescribiendo tiempos de conducción y descansos, por ejemplo. Por esta razón, el camión tiene que detenerse con frecuencia. Con ello se pretende minimizar el riesgo de fatiga y prevenir posibles errores de conducción. Sin embargo, un camión que no dependa de un conductor no tendría que tomar estos descansos y podría moverse continuamente, lo que es posible gracias a la conducción autónoma.
“No hay que olvidar que esta tecnología puede salvar muchas vidas. Es posible que aún no exista la tecnología perfecta, pero ciertamente una que actúe significativamente mejor que los humanos”. Dr. Jan Becker , experto en conducción autónoma, en una entrevista (GER) con la asociación automovilística alemana ADAC de marzo de 2021.
Uno podría pensar que prescindir del trabajo humano conduciría a la pérdida de puestos de trabajo, pero esa suposición ignora el desafío crítico actual de la industria: la falta de conductores de camiones. Según estimaciones, solo Alemania tendrá una escasez de alrededor de 185 000 conductores de camiones (GER) para 2027. En 2020 ya faltaban 45 000 conductores calificados. En esta difícil situación, los camiones autónomos podrían aliviar a las empresas de logística en Alemania y mantener el sistema de transporte global, las cadenas de suministro y, por lo tanto, el suministro de ciudadanos funcionando sin problemas.
Conducción Autónoma: Así es el Estado del Arte
El requisito previo para la conducción autónoma son, ante todo, los datos. Así como usamos nuestros sentidos para recoger información que luego es procesada por el cerebro para tomar decisiones, los vehículos autónomos recopilan datos con sus sensores. Innumerables cámaras en la parte delantera, trasera y laterales escanean exhaustivamente todo el entorno del vehículo, detectan inmediatamente obstáculos potenciales, calculan las distancias a ellos y analizan la velocidad a la que se acercan. En función de estos datos, la computadora de a bordo determina cómo debe moverse el vehículo.
Piloto automático en aviación
Lo que aún se encuentra en una etapa temprana en el tráfico por carretera ha sido estándar durante mucho tiempo en la aviación y la industria aeroespacial. Cuando la aeronave alcanza cierta altitud, los pilotos pueden activar el piloto automático y renunciar al control activo de la aeronave. Solo cuando la aeronave desciende por debajo de una altitud específica o se requiere alguna otra intervención, el piloto reanuda el control. Esto es posible gracias a los sensores que transmiten señales a la computadora de a bordo; desde allí, los pulsos de control se envían a los servomotores que equilibran hidráulicamente el timón de la aeronave.
Esto le quita tensión al piloto, que puede dedicarse por completo a supervisar las funciones de la aeronave y monitorear el espacio aéreo. El piloto está así idealmente preparado para cualquier situación potencialmente difícil. Por lo tanto, todos los que alguna vez se han sentado en un avión ya están familiarizados con la experiencia de la movilidad autónoma, probablemente sin percibirlo conscientemente como tal.
Redes para Camiones Autónomos
En el futuro, el intercambio de datos entre diferentes camiones y automóviles contribuirá a la conducción segura de vehículos autónomos. En un sistema de tráfico vial en red, tecnologías como 5G permiten que los vehículos se comuniquen entre sí en tiempo real y compartan su ubicación con otros vehículos, así como su velocidad u otra información relevante.
La red cubre áreas que no pueden ser monitoreadas adecuadamente por un solo conductor. Si en estos puntos ciegos acechan fuentes potenciales de peligro, el vehículo puede ser informado de esto en una etapa temprana e intervenir de forma autónoma. Porque aunque el tiempo de reacción de un coche o camión autónomo sea más corto que el de un humano, la distancia de frenado no lo es. Por lo tanto, la información correcta en el momento adecuado es crucial para evitar un accidente.
Conductores humanos: aún superiores a la conducción autónoma en algunos aspectos
Los vehículos autónomos no solo reconocen posibles obstáculos, sino también señales de tráfico y las normas de tráfico asociadas. Saben en qué carril se encuentran, en qué dirección se dirigen o qué reglas de derecho de paso se aplican. Incluso consideran probabilidades y reconocen el tipo de obstáculos. Por ejemplo, ¿es un peatón, un automóvil o simplemente un obstáculo estacionario? Los vehículos autónomos utilizan probabilidades para predecir si un obstáculo se moverá fuera de la zona de peligro por sí solo o si permanecerá estacionario.
La tecnología de la conducción autónoma está muy avanzada en la actualidad. Sin embargo, todavía tiene sus límites. En muchos aspectos, ya es superior al conductor humano, pero especialmente cuando se trata de comprender situaciones complejas, los humanos todavía están un paso por delante. La tecnología no responde a la comunicación no verbal y no es capaz de resolver situaciones complejas desconocidas, todavía no.
La importancia de la conducción autónoma para la logística
La conducción autónoma generalmente se considera desde la perspectiva del conductor, pero el desarrollo de tecnologías autónomas es particularmente relevante para la industria logística. Por un lado, por la urgente escasez de camioneros ya comentada anteriormente. Por otro lado, puede hacer que la logística sea más sostenible, más segura y más eficiente. Ya existen muchos conceptos y enfoques sobre cómo se puede poner esto en práctica.
Argumentos a favor de la conducción autónoma en logística:
.- La escasez de camioneros puede compensarse parcialmente.
.- Los camiones autónomos pueden cubrir distancias más largas y realizar más viajes en la misma cantidad de tiempo porque ya no se requieren descansos para el conductor (que ahora es redundante).
.- Se aumenta la seguridad: el error humano representa el 90 por ciento de todos los accidentes de tráfico (GER). La conducción autónoma eliminará este problema en el futuro.
.- Los camiones que circulan muy cerca unos de otros pueden comunicarse entre sí y optimizar el flujo de tráfico; esto se denomina formación de pelotones. Si el primer camión frena, los siguientes camiones pueden frenar automáticamente en la misma medida en el mismo segundo y luego acelerar de nuevo. Ningún camión reduce la velocidad más de lo necesario y luego tiene que usar menos combustible para acelerar de nuevo. El riesgo de congestión se reduce mediante el uso de pelotones de camiones, aumenta el flujo de tráfico y disminuye el consumo de combustible.
.- La digitalización y la automatización en la logística ya están muy avanzadas en la actualidad, y los robots son una característica cada vez más común de los equipos de almacén. Con base en la infraestructura existente, sería comparativamente simple integrar camiones autónomos en los procesos logísticos, facilitándolos así.
Actualmente se están realizando decenas de pruebas de conducción autónoma en todo el mundo. Están diseñados no solo para monitorear la seguridad de la tecnología, sino también para identificar dónde podrían ser posibles mejoras en la eficiencia del tráfico: cómo se pueden evitar los atascos, cómo se pueden cubrir distancias más rápidamente y cómo se pueden reducir las emisiones. Es muy probable que todavía estemos en las primeras etapas de desarrollo, pero se puede esperar un progreso revolucionario en los próximos años, y no solo por la escasez de conductores.
Camiones de conducción autónoma: muchas preguntas aún pendientes
Sin embargo, a pesar de todo el entusiasmo por la conducción autónoma, se debe entender una cosa: la industria aún tiene un largo camino por recorrer. En primer lugar, la tecnología en sí debe volverse aún más refinada, confiable y segura. En segundo lugar, la red de transporte europea hasta ahora solo es parcialmente adecuada para la conducción autónoma. Sin embargo, para las pruebas de campo iniciales, algunas partes de toda la red de carreteras podrían designarse para probar la tecnología autónoma. Las preguntas que se responderán después de las pruebas son: ¿Cómo se logra la transición de una red de rutas con conductores a una sin conductores? ¿Y qué tan eficiente sería el uso de conductores en comparación con el sistema autónomo?
Y luego está la cuestión de la base legal: ¿Quién es responsable si ocurre un accidente? ¿El fabricante del vehículo, el desarrollador del software o, más bien, el (co)conductor, operador o propietario del vehículo? Incluso si esta pregunta encuentra una respuesta, pasará bastante tiempo antes de que se establezca la base legal para la conducción autónoma, especialmente en Alemania y en toda Europa.
Fotos: DHL Freight
