En corto: Diez puntos de descuento en el impuesto de hidrocarburos. "Camionero García". Opinión

Supongamos que el Gobierno propusiera para el sector del transporte un descuento en el impuesto sobre hidrocarburos de diez puntos. Pregunto, ¿Sería una solución?. Contundentemente, no.

El paso siguiente a esta aceptación, muchos transportistas estarían haciendo un ajuste de precios a la baja, y digo transportistas, porque las agencias que se dedican a comprar y vender viajes tardarían cero coma en bajar los precios a la venta de sus viajes. Y estos sí que son un problema para el sector.

Llevo mucho tiempo diciendo que el sector apunta mal en la diana de sus problemas, no sé si interesadamente o por miedo a enfrentarse a su enemigo natural: el cargador y su red de subasteros digitales.

Cuando digo muchas veces que los transportistas son unos incapaces crónicos, lo digo porque está claro quién tiene el poder de parar esta sangría y no son, precisamente, los cargadores. El transporte de mercancías por carretera tiene todo el poder, pero también tiene miedo y lo peor, es cobarde para pasar a la acción.

Ahora pregúntese la opinión pública por qué la patronal pide la intermediación del Gobierno para ser garante de sus reivindicaciones. Fácil, los transportistas no se fían de ellos mismos. Son por lo general incumplidores de lo que firman, y lo que firman, para ellos es papel mojado.

Hasta el paro convocado, para ellos mismos es una pantomima. Pregunten, pregunten a ver cuántos están de acuerdo con dicho paro.

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