Camionera: seguir o tirar la toalla. "Camionera Metalera". Opinión
Hay momentos en los que las noticias generales de actualidad en nuestro sector pierden todo su interés para mí y mi mente solo se puede concentrar en lo que me pasa a mí, personalmente, en mi trabajo. Son momentos en los que pienso que cómo es posible que una muy buena empresa se convierta en insoportable y me plantee si merece la pena pelear por continuar o tirar la toalla y largarme con viento fresco a otro lado.
No voy a negar que, hoy día, es un chollo estar en una empresa que paga religiosamente, que no tienes que cargar ni descargar, que duermes todas las noches, que respetan los fines de semana en casa, que cobras por dietas según el convenio provincial correspondiente... pero, ¿eso es todo?. También, es una empresa que anula tu profesionalidad, que no puedes tomar ninguna decisión pero eres responsable de lo que pase, que desde la oficina actúan según les cuenta el mindundi de turno; quien para escalar posiciones ante el jefe de tráfico (y jefe de personal, y de mantenimiento...en un tres en uno) como no puede destacar por su trabajo, se dedica a contar mentiras sobre los compañeros para que no le hagan sombra.
Una empresa, que si digo que llevo alguna rueda en mal estado, la contestación es “cuando tengas un hueco vas al taller” y los únicos huecos que me dejan libres son sábados y domingos. Pero no revientes que entonces la culpa es tuya por no haber ido al taller.
Una empresa, que si tengo problemas porque hay que cambiar la instalación de la centralita del camión, la respuesta que me da es “tú tira, que es muy caro cambiarlo”... pero cuando llamo desde el cliente avisando que el camión no arranca por fallo de esta centralita, tengo que escuchar “¿eso como puede ser? ¡Tienes que entrar a cargar!”.
Una empresa, que en ocho meses sólo me ha autorizado a ir al lavadero una vez... ¡una en ocho meses! Apuntar que mis compañeros se lavan los camiones pagándolo de su bolsillo en surtidores con manguera con pistola.
Una empresa, que si llamo un lunes para que me den la dirección correcta de un cliente (la que me han dado no existe), me contesta “ eso lo tenías que haber pedido el viernes, es que vais como BORREGOS”. Apuntar, que esta empresa, no te da una bola de cristal ni un tarot para que adivines con antelación cuándo una dirección QUE TE DAN ELLOS es correcta o no.
Una empresa, que cuando les recuerdo que el siguiente fin de semana tengo que recuperar horas de descanso semanal (de un anterior finde en el que ELLOS me mandaron sacar mi tractora del taller siendo sábado y teniendo que salir domingo), me recriminan que mi camión FACTURA MENOS que los demás; como si yo tuviera algún poder de decisión sobre los viajes que me dan. Y alguna otra cosilla más sin importancia, que no voy a contar para no aburriros.
Sé que esto no es anecdótico o que sólo me pasa a mi. Por desgracia, cosas por el estilo están a la orden del día en algunas de nuestras queridas empresas con algunos de nuestros queridos encargados de tráfico, de personal, de mantenimiento. Y luego, hay quien se pregunta porqué nuestra profesión no es atractiva para la gente joven.
Hombre, pues no sé porqué. Lo que sí sé es que, cuando nuestros hijos nos oyen contar estas batallitas en casa, lo más normal es que prefieran ser youtubers, tronistas, influencers y cosas similares. Y luego, tienes que escuchar lindezas como que ¡HACEN FALTA CAMIONEROS!...jajajajaja
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Foto: Consuelo Chambó