Escasez de conductores de camiones: ¿Cómo encontrar por fin una solución?

Escasez de conductores de camiones: ¿Cómo encontrar por fin una solución?

Desde hace varios años, el problema de la escasez de conductores de camiones se manifiesta de forma aguda por los profesionales del transporte. La profesión no proyecta una imagen atractiva, pero sin duda porque el sector no ha logrado reafirmar su valor en su contexto moderno. Sugerencias.

La escasez de conductores cualificados ha sido una realidad para el sector del transporte en Europa durante años y en 2020 esta tendencia no se está invirtiendo. Incluso antes del inicio de la crisis sanitaria y sus consecuencias económicas, que aún son difíciles de cuantificar, la IRU (Unión Internacional de Transportes por Carretera) había precedido el escenario de un empeoramiento de la escasez de conductores este año. Según varios observadores, la crisis de Covid-19 acentuará aún más el problema.

La escasez global de conductores aumentará del 23% en 2019 al 36% este año (fuente: IRU).

Esta tendencia se ha confirmado en muchos países europeos. La organización alemana Fair Truck sugiere que 150.000 puestos de trabajo estarán vacantes en 2022. En Francia, la Association de formation professionnelle du transport comunicó la cifra de 42.000 puestos vacantes . En el Reino Unido, el FTA (ahora denominado Logística) informó a finales de 2019 que había un déficit de 59.000 conductores. En España la escasez de conductores profesionales es del 20% (15.000 conductores) y aumentará al 30% en un año, según IRU y Fenadismer (Federación Nacional de Asociaciones de Transporte en España). Así, en el mismo período, la escasez aumentará del 22% al 37% en Polonia y del 50% al 62% en Rumanía.

Escasez de conductores, un problema de atracción

Las razones de la escasez de personal son bien conocidas, pero siguen siendo difíciles de superar. En primer lugar, la carga de trabajo percibida puede alejar a los candidatos (horas de trabajo, a veces incluso turnos de noche, estrés relacionado con el cumplimiento de los plazos y las solicitudes de los clientes, el requerimiento físico del trabajo en las zonas de carga/descarga, etc.).

Para el transporte de media y larga distancia, la distancia desde el hogar también se puede mencionar como un punto en contra a la hora de elegir esta profesión, así como la dificultad de conciliar la vida laboral y familiar. Además, la imagen que tiene la profesión en sí es bastante negativa. Durante el confinamiento en Europa, hay que decir que la comunicación sobre los «héroes» conductores, centinelas del famoso «frente», no despegó realmente, a pesar de que era un concepto bien fundamentado, especialmente desde el punto de vista de asegurar la entrega de los suministros.

Por último, el nivel de remuneración se considera bajo: el salario medio de un conductor de camión en Europa es de alrededor de 2.000 euros al mes.

Pensando en múltiples soluciones para cambiar la situación.

Para mejorar esta situación, cada vez más apremiante, es esencial considerar varias soluciones y hacer referencias cruzadas entre ellas. El primer objetivo es mejorar la imagen de la profesión y comunicar mejor la realidad. Algunos estereotipos están muy arraigados, pero hay que destacar que la seguridad y el confort de los vehículos han mejorado considerablemente. Los camiones están ahora mejor equipados, especialmente en las cabinas, por ejemplo, un mejor espacio para dormir. La actividad se ha ido automatizando progresivamente, con tendencia también hacia costes de fletes menos restrictivos. También observamos que, desde hace varios años, se han hecho grandes esfuerzos para asegurar más y mejorar las zonas de descanso. Finalmente, los camioneros trabajan ahora en logística, relaciones con el cliente y optimización de la flota, ya que manejan datos, y por lo tanto hay más perspectivas de desarrollo profesional que nunca (formador, funciones de gestión de flota, etc.).

Otra solución a corto y medio plazo sería ajustar la contratación. Se calcula que sólo entre el 3 y el 4 % de los conductores en Europa son mujeres. Además, la edad media de los conductores de camiones es de unos 40 años, cifra que es casi suficiente por sí sola para explicar la escasez de conductores. Esto se acelera también por las jubilaciones. Adaptar las campañas de reclutamiento para llegar a más mujeres y grupos de edad más jóvenes podría tener un impacto positivo. Este enfoque ya ha tenido éxito en Estados Unidos.

Por último, deberían considerarse soluciones complementarias. Camiones autónomos – la autosuficiencia del vehículo está progresando y el sector de vehículos pesados está a la vanguardia. La escasez de personal se resolvería temporalmente y podrían implementarse alternativas como vehículos compartidos o platooning. Debemos señalar que se trataría de una medida a medio plazo y que los camiones autónomos son muy caros.

Un articulo original de: F-Mag-Fraikin.es