Opinión

Memoria de pez. "Camionera Metalera". Opinión

Memoria de pez. "Camionera Metalera". Opinión

La mitad del país (no sé el porcentaje exacto) ha vivido este tiempo confinada en casa; la otra mitad, acudiendo a su trabajo por considerarse esencial.

Durante un tiempo estas dos maneras de vivir la cuarentena ha estado en casi perfecta armonía. Unos agradecían a los que se quedaban en casa, otros apoyaban y aplaudían a los que tenían que seguir trabajandoEn medio de todo, esto hemos estado nosotros.

El sector del transporte pasó a formar parte de los dos grupos: unos han seguido trabajando con cargas de productos esenciales y otros se han visto obligados a parar la actividad porque sus cargas habituales no se podían realizar por haber cerrado muchas empresas.

En las primeras semanas durante las que el país dependió de nosotros para no desabastecerse de alimentos, material sanitario y otros productos básicos, se reconoció nuestro trabajo, se nos aplaudía, incluso éramos “héroes”... y nosotros con la sonrisa en la cara por la satisfacción del trabajo bien hecho y porque incluso, llegamos a pensar que ¡por fin! se iba a reconocer nuestro esfuerzo...

Ahora empezamos a pasar fases. Los confinados en casa ya van saliendo, unos respetando las condiciones impuestas para preservarnos de futuros contagios y otros tomándose las fases como “barra libre”. Por otra parte, cada vez son más las empresas que van retomando la actividad y mucha gente se va reincorporando a su trabajo con más o menos restricciones.

¿Y dónde hemos quedado los camioneros?. Pues ...eso.. volviendo a la normalidad... a la normalidad de toda la vida. ¿Qué nos habíamos creído? ¿Que nuestra posición en la sociedad iba a cambiar? ¿Que el concepto de "camionero" igual a “pieza del camión” se había acabado? ¿Que por fin se iba a reconocer nuestro trabajo?

Más nos vale que empecemos a darnos cuenta de que el ser humano tiene memoria de pez (3 segundos).

... la vida sigue... la lucha sigue.

Más artículos de opinión de Camionera Metalera

Foto: Begoña Urmeneta