Opinión

¡Y no los entiendo!. "Camionero García". Opinión

¡Y no los entiendo!. "Camionero García". Opinión
Imagen del control fronterizo entre Alemania y Polonia
¡Y no los entiendo!. "Camionero García". Opinión

Somos los españoles de ser entendidos de toda circunstancia, muchas veces con arte torero y a toro pasado, como seleccionadores, somos el mejor y más entendido, pero después de haber perdido el partido, porque desde la barrera o las gradas las cosas son más fáciles, sobre todo cuando uno no tiene la responsabilidad de responder ante terceros.

No hablemos de política, cualquiera que gobierne es el peor posible, depende del lado que uno mire y hay que respetar el libre pensamiento y la libertad de expresión, pero ahora no estamos ni en la barra de un bar ni en las redes sociales, ahora estamos en la, posiblemente mayor crisis sanitaria, económica y social de la historia conocida y digo mayor porque también tenemos mucho conocimiento y tecnología. Y es una crisis global que aquí somos mucho de mirarnos el ombligo y global debiera ser la solución, para nosotros la solución debe ser consensuada en el marco de la CEE, si es que están por hacer política social y no dinero para cuatro.

Y no sabemos aún cuánto va a durar esta pandemia ni siquiera sabemos cómo se van a mostrar los brotes en el futuro.

Agoreros hay en todas partes, farsantes del tres al cuarto también, negacionistas, ni te digo y unos miles de salva patrias, también hay. Digo yo que no nos tiene porque gustar ni el gobierno, ni la oposición, pero al menos no lanzar discursos y proclamas de guerra y sí mostrarse agradecido por la labor que se está haciendo desde la sociedad en su conjunto y no estar siempre en la negatividad y el catastrofismo que desmoraliza al más pintado.

Yo, que soy del transporte y sabiendo que la cosa está muy difícil, entiendo que no es hora de derrocar ni poner gobiernos, ni hacer huelgas ni poner palos en las ruedas. Soy de ir caminando hacía una salida digna y como he dicho más de una vez, quizás alguno o alguna empresa se quede por el camino. De esto último, no tengo dudas.

Si caen muchas empresas piratas y chanchulleras que diría el otro, bienvenida sea la circunstancia, que cae alguna por no poder superar el tema financiero por haber sido impoluta con lo fiscal y lo laboral, habrá que pedir al gobierno que la rescate como se rescataron los bancos, y así una tras otra, sin abandonar a nadie. Para esto, habrá que luchar a brazo partido, porque no nos lo van a regalar.

Esta situación del COVID-19 la vamos a pagar y nos va a costar caro y mucho tiempo y si el confinamiento sirve para acortar ese tiempo mejor para todos y antes saldremos de la crisis.

Dice mucha gente del ámbito empresarial que no había que cerrar empresas, tal vez, pero señores imaginen este escenario, en una situación de normalidad el contagio se multiplicaría infinitamente, con lo cual habría que cerrar toda actividad por baja de enfermedad de toda la plantilla, ¿Si? Una razón me lleva a este convencimiento, ¿Es que se han preocupado las empresas en la salud laboral y la seguridad de los trabajadores? ¿Con qué celo lo están haciendo ahora?. No las tengo todas conmigo, vista la situación.

A lo nuestro, ¿Cuando se han preocupado las empresas de sus conductores, de su salud, de su seguridad?, solo en la mínima medida. Ahora somos admirados y aplaudidos, pero tenemos que seguir cagando debajo del remolque y meando en una botella. Creo que con esto lo digo todo y no es por despreciar, sino para que reflexionemos de una vez de que es lo que queremos para el transporte por carretera y para nosotros mismos, porque después de esta crisis todo volverá a la normalidad, los ricos más ricos y los trabajadores pagando la fiesta. Respecto al transporte, más crisis, peores precios, peores salarios y menos reconocimiento... y a tragar. Por lo civil y por lo criminal.

Creo que en vez de perder el tiempo en prejuzgar la gestión o la situación deberíamos aprender de lo que nos está pasando y poner el primer ladrillo para el cambio, sin demagogia, sin intereses personales, sin revancha ni rencor, sin colores políticos. Debemos organizarnos y no para pedir cuentas sino para poner negro sobre blanco de que nuestra dignidad y nuestros derechos como trabajadores, ya sean por cuenta propia o ajena no se pueden pisotear al ritmo que le convenga al sistema o mercado, sino que nosotros seamos dueños de nuestro destino.

Ya hay muchos camioneros en casa, dándole a las teclas para compartir memes y mil y una chorrada, en vez de empezar a comunicarnos entre nosotros y participar en una tormenta de ideas para crear un proyecto creíble y realizable y que tenga un tiempo de ejecución, al fin y al cabo, el objetivo común de dignificar esta santa profesión.

Todo lo demás es agua de borrajas, pastor, ovejas y perro que las cuide.

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Foto: Archivo Diario de Transporte