Desde hoy la manipulación del tacógrafo puede conllevar hasta 3 años de cárcel

Desde hoy la manipulación del tacógrafo puede conllevar hasta 3 años de cárcel
Un tacógrafo manipulado
Desde hoy la manipulación del tacógrafo puede conllevar hasta 3 años de cárcel

@Luna_cb.- La manipulación del tacógrafo de un camión o de autobús deja de ser una infracción administrativa (500 euros y pérdida de seis puntos) y pasará a convertirse en un delito considerado como  falsedad en documento oficial.

A partir de hoy, tanto los conductores de camiones, como de los de autobuses, sean asalariados o autónomos que manipulen el tacógrafo se enfrentan a penas que pueden superar los tres años de cárcel.

Ha sido el fiscal coordinador de Tráfico de España, Bartolomé Vargas, quien ha enviado esta mañana una instrucción a todas las jefaturas de tráfico de la Guardia Civil y a las distintas policías autonómicas para que intensifiquen los controles e investiguen a los conductores de ambos vehículos de transporte (y, en su caso, también a sus empresas) que adulteren el tacógrafo. Esta práctica, que se ha extendido en los últimos años, ha dejado de ser una infracción administrativa (500 euros y pérdida de seis puntos del carné de conducir) para convertirse en un delito de falsedad en documento oficial.

En una rueda de prensa en la sede de la Fiscalía General del Estado, Vargas ha señalado que desde este lunes las unidades de Tráfico de la Guardia Civil, los Mossos d'Esquadra, la Ertzaintza y la Policía Foral de Navarra cuentan con las pautas para investigar este delito a raíz de una sentencia del Tribunal Supremo que estimó un recurso de la fiscalía. 

El resultado de la sentencia

Esta sentencia, dictada a finales de enero, abría la puerta a la vía penal en estos casos al considerar estos manejos como delito de falsedad en documento oficial del artículo 303 del Código Penal, castigado con penas que pueden superar los tres años de cárcel y con ingreso en un centro penitenciario. La medida está enfocada a los conductores de transporte de viajeros y camiones de alto tonelaje.

Vargas ha puntualizado que el conductor no será el único responsable de la infracción sino que además se perseguirá al resto de posibles "cooperadores necesarios", como directivos o encargados de la empresa de transporte, del contratista o de los talleres. La apertura de una investigación penal en estos casos puede tener otras derivadas, ya no solo para el chófer infractor, también para los responsables de sus empresas en aquellos casos en que el chófer es asalariado. En la lupa de la fiscalía también se hallan los conductores autónomos, gremio en el que más casos de manipulaciones del tacógrafo se detectan.

También se controlarán las empresas

Los agentes podrán elevar sus pesquisas a los empresarios y determinar si han sido estos los que han coadyuvado a la manipulación con vistas a evitarse multas por exceso de velocidad o hacer la vista gorda si su empleado se salta las horas máximas de conducción por jornada. Y, lejos de obligarles a descansar, permitir que excedan el horario con tal de que la mercancía llegue al destino en los plazos fijados con los proveedores. Lo que podría constituir, además, otro delito contra los derechos de los trabajadores. Aunque fuentes de la Guardia Civil señalan que estas conductas son excepcionales a nivel empresarial.

En su instrucción Vargas ordena a los agentes de tráfico que extremen los controles de tacógrafos, y les informa de que ya disponen de las armas que ofrece el Código Penal para combatir estas maniobras. Con permiso judicial, pueden realizar hasta registros en empresas para cotejar los datos de los tacógrafos de una flota determinada con los que extraiga la Guardia Civil de los camiones infractores. El delito continuado puede alcanzar la pena de cuatro años de cárcel. La flota de camiones en España es una de las más importantes de Europa y un sector básico de la economía nacional.

Para Vargas, que ha estado acompañado de miembros de Tráfico de la Guardia Civil y los Mossos, la manipulación de los tacógrafos vulnera las reglas de la competencia y los derechos laborales de los conductores, puestos contra la pared por la precariedad económica y con unas condiciones que ponen en peligro su integridad física.

Los riesgos de la manipulación del tacógrafo

"La manipulación esconde el ir más deprisa, con menos horas de descanso para llegar antes que los demás", ha advertido antes de criticar que los conductores se ven abocados a circular en estado de somnolencia, a punto de dormirse, consecuencia de la fatiga al volante que lleva al consumo de drogas para mantenerse alerta.

Vargas ha incidido en que adulterar estos aparatos afecta en los sistema esenciales de seguridad como los de frenada y estabilidad que expone a los vehículos a bloqueos, derrapes o al efecto tijera, cuando el remolque gira en dirección contraria a la del camión.

La manipulación más común que emplean algunos camioneros es colocar un imán en el censor que transmite la información del motor al tacógrafo, bloqueándolo. Otros se decantan por modificar los datos hackeando el tacógrafo y corrigiendo las infracciones. Fuentes de la Guardia Civil indican que con un adecuado análisis, y más ahora que cabe utilizar los resortes de la vía penal, es fácil detectar si un tacógrafo ha sido manipulado. El fiscal jefe Vargas tiene intención de reunirse con representantes del sector del transporte y de los sindicatos para explicarles esta nueva normativa punitiva.

Foto: Archivo Diario de Transporte