Los Juegos del Hambre. "Siempre por lo negro". Opinión
Recordar la historia enriquece, revivirla empobrece, más aún cuando lo que se revive es la cuestión salarial.
En este oficio de cangrejo, resultado de obsesionarse en ir para atrás, los veteranos presumen de mapas de papel en lugar de hacerlo por cobrar bien y los neófitos se conforman con lo que les den, es difícil avanzar pues nadie controla lo que hay que controlar.
Cercanos están aquellos tiempos en los que por encima del hombro mirábamos a los lusos, esos que ahora nos ven pasar por el aro de lo que ellos ya están por olvidar.
Salarios de miseria, condiciones laborales impensables hace bien poco, son el pan nuestro de cada día, desgraciadamente, con la resignación y la apatía de esos que se subieron a un camión sin amar la profesión, más por necesidad que por ilusión.
El resultado de tanto chaleco mugriento y tanto muerto de hambre suelto es consecuencia de aquellos de "yo por ese sueldo no me levanto de la cama" o "el domingo que salga tu puta madre... ", lección que la otra vez que faltaban profesionales los chanchulleros mafiosos se aprendieron del tirón.
Para lo que nos queda en el convento... Piensan los ya veteranos y mientras tanto los que tú y yo sabemos se frotan las manos, que más da, si todo es alquilado...
(Foto de archivo)