Opinión

La milonga de las cooperativas. "Siempre por lo negro". Opinión

La mafia, al más puro estilo italiano. "Siempre por lo negro". Opinión
Un camión circulando
La milonga de las cooperativas. "Siempre por lo negro". Opinión

La única tarjeta que tú necesitas para trabajar con un camión, es la de conductor. El único titulo es el CAP y la única carga que tienes que arrastrar es la bolsa de la ropa de una cabina a otra. Esas milongas de meterte en una cooperativa no son más que una sarta de mentiras, las artimañas de un vividor intentando que tú te empeñes y él vivir mejor.

Y es que se lo ponen a huevo, buscan cuatro ingenuos a los que venderles la moto de una rentabilidad inexistente en hacerse autónomos; diciéndoles que van a ganar el oro y el moro, cuando la triste realidad es que solo buscan que firmen una deuda, unas condiciones y unos contratos que solo los van a esclavizar.

Poco o nada nos importa a los demás lo que estos compañeros de profesión hagan con sus vidas, pero lo que es evidente es el daño que, económicamente, causan al sector trabajando a precios que a los verdaderos autónomos y pymes, que cumplen con sus obligaciones, les es inviable aceptar.

No es más que pan para hoy y hambre para mañana. No es más que la forma de ser un trabajador sin derechos laborales, un esclavo atado de pies y manos a los flotistas y logísticas que, a través de personajes de difícil calificación, crean cooperativas franquicia para abastecer a estos, de falsos transportistas sin experiencia, con escasos conocimientos y que bajo lagunas legales les saquen los viajes cobrando precios miserables.

Te alquilan algo que nunca de pertenecerá, te aportan un titulo del que nunca dispondrás, te pagan a unos precios con los que difícilmente subsistirás. Estarás cotizando en un régimen que no te pertenece, un régimen en el que tu baja laboral sera una miseria, tu desempleo una limosna y una jubilación que no te permitirá retirarte después de una vida de esfuerzo y trabajo.

Habla con compañeros que hayan pasado por ese calvario, pregunta a gente que haya caído en esas estúpidas propuestas y abre los ojos. Nadie da duros a cuatro pesetas. Nadie puede decirte lo que debes hacer, pero si puede ayudarte a no caer en el despropósito de no ser un autonomo de verdad, un cooperativista sin garantías legales, un asalariado sin derechos laborales y que cualquier vividor de tres al cuarto viva de tu esfuerzo, con el único objeto de explotarte sin ningún miramiento y convertir tu futuro en un tormento. Por lo negro compañero...

(Foto de archivo)

El Maño