"Me pusieron a descargar un camión a las dos de la tarde. Tuve mareos y cuando me negué, me echaron"

El joven continúa algo abrumado tras la gran repercusión de su denuncia pública a través de Twitter
Imagen de un termómetro en una ciudad española
"Me pusieron a descargar un camión a las dos de la tarde. Tuve mareos y cuando me negué, me echaron"

Mario (nombre ficticio) asegura que fue despedido de un almacén después de que se negara a descargar un camión, tras haberse sentido indispuesto por realizar esta tarea un día antes.

El pasado 2 de agosto, en plena ola de calor, Mario cuenta que tuvo que descargar durante un par de horas un camión a las dos y media de la tarde, situado al sol, tras lo que acabó mareado y con temblores. Al día siguiente le volvieron a pedir que realizara la misma tarea, aunque en su contrato figuraban otras funciones. "Les dije que no, que no lo iba a hacer. El jefe llegó hecho una furia, gritando que "a la puta calle", relata el trabajador, que asegura haber sido despedido del centro logístico.

El joven continúa algo abrumado tras la gran repercusión de su denuncia pública a través de Twitter, con más de 13.600 retuits y 600 comentarios. "La verdad que me arrepiento un poco de haberlo contado. Mucha gente se ha solidarizado conmigo, pero también mucha otra duda de que sea cierto, te llaman flojo, te dicen 'haber estudiado'... O te insultan directamente", relata a eldiario.es, al que muestra su contrato de trabajo y el fin del mismo a través de una ETT.

 

Aunque en la documentación figura que el trabajo por obra y servicio ha concluido, el chico asegura que el motivo de su finalización es que se negó a cumplir con estas órdenes. Está todavía pensando si denunciar ante la Inspección de Trabajo lo ocurrido, "mucha gente me lo ha dicho, pero no sé si lo haré", y prefiere que no se publique el nombre de la compañía en cuestión por temor a represalias.

"Llevo trabajando desde lo 16 años y tengo 30, pero no había visto nunca algo así". Mario explica que ha trabajado en supermercados, hoteles y en puestos de logística en almacenes, como este último, "no se me caen los anillos por trabajar en puestos que no tienen relación con la carrera que he estudiado, pero lo que denuncio son estas condiciones, que son una locura".

El trabajador explica que el camión llegó con 297 bultos, "cada bulto estaba formado por dos tubos de lona enorme, de unos 20 kilos". "Me llamaron a mí porque no tenían suficiente gente, aunque en mi contrato no figuraban estas funciones. Éramos tres personas y el jefe no hacía más que meternos prisa. Nos llegó a decir que 'fuera palés' y que sacáramos los bultos a mano". Tras ello, "ya tenía frío incluso, al final del día me vi incapaz, estaba que me mareaba, tenía calambres en las piernas y los compañeros me decían que estaba muy rojo". (Foto de archivo)

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