La banca avisa a Eroski de que se arriesga al concurso si no refinancia en tres meses

A partir del 30 de julio, el crédito será exigible ya a corto plazo
Imagen de Eroski
La banca avisa a Eroski de que se arriesga al concurso si no refinancia en tres meses

Las tensiones entre la banca acreedora y Eroski por la refinanciación de un préstamo sindicado de 1.690 millones de euros amenazan con arrastrar a la compañía a una situación muy complicada. Tal y como adelantó ayer elEconomista, en el caso de que no haya acuerdo el gigante vasco de la distribución tendría que cumplir con una cláusula firmada en el contrato en 2015 y dejaría de ser una cooperativa para convertirse en una sociedad anónima, permitiendo de este modo la entrada de accionistas en su capital.

Pero el problema va mucho más allá. Según explican fuentes financieras, "Eroski necesita llegar con urgencia a un acuerdo porque en caso de no lograrlo en poco más de dos meses, a partir del 31 de julio la deuda pasaría a ser exigible inmediatamente a corto plazo".

Si eso ocurriera, el auditor de la empresa, KPMG, tendría que advertir en los estados financieros del primer semestre que la empresa se enfrenta a un posible impago de sus compromisos financieros, lo que pondría en alerta a los proveedores y podría provocar desequilibrios y tensiones de tesorería. El riesgo en ese momento es que se produjera algún impago, porque entonces los acreedores podrían instar el concurso de acreedores. Ante esta situación, lo que ha hecho la banca -Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia y Sabadell, que cuentan también con el asesoramiento de KPMG-, ha sido trasladar a la empresa la advertencia sobre las incertidumbres que se podrían generar.

El grupo dice que cumplirá

Eroski no oculta que el riesgo si no logra un acuerdo de refinanciación antes del 31 de julio es mayor, pero insiste también en que en el caso de que éste no fuera posible, no cambiaría nada. Una portavoz de la empresa explicó ayer que "pase lo que pase, a partir del 31 de julio, seguiremos cumpliendo como hemos hecho hasta ahora cada uno de nuestros compromisos financieros". Las negociaciones mientras tanto siguen en marcha y aunque, como la banca, la compañía desea llegar a un acuerdo pronto, cree que tiene todavía margen suficiente, de más de un año, hasta que no se produzca el vencimiento definitivo de la deuda. Fuente: eleconomista.es