Un estudio alerta de que el veto de camiones en la N-232 traslada la siniestralidad a otras vías

Un estudio alerta de que el veto a camiones en la N-232 desvía la siniestralidad a otras vías
Imagen de la N-232
Un estudio alerta de que el veto de camiones en la N-232 traslada la siniestralidad a otras vías

En un reciente estudio, la consultora navarra experta en Seguridad Vial Seviprefor advierte de que el veto de camiones en la N-232 no soluciona el problema de siniestralidad de esta vía sino que lo traslada a otras carreteras.

De acuerdo con este informe, que firma José Antonio Sánchez de Diego, secretario de la Federación Nacional de Asociaciones de Profesores de Formación Vial, el traspaso de la circulación desvía el problema, en primer lugar, a la AP-68, porque se incrementa el riesgo no sólo por el aumento de usuarios, sino también por la diferencia de velocidad entre ellos y cuanto mayor es esta disparidad «mayor es el riesgo de accidente», apunta el estudio.

En segundo lugar, Seviprefor considera que el peligro se incrementa en algunas salidas de la autopista, como la de Tudela, situada en las proximidades de un hospital. Y por último, el riesgo aumenta en otras carreteras como la NA-134 y las que sirven de acceso y salida a los peajes de la autopista. Ante esta situación, instan al Gobierno de Navarra a que se pronuncie sobre la medida que adoptó el Ministerio de Fomento porque «el riesgo en sus vías ha aumentado de forma exponencial».

La mencionada consultora no sólo analiza el impacto del riesgo y toca también la vertiente económica porque la restricción del tráfico pesado afecta «a un eje económico y, por ende, con importante tráfico de camiones» y «si a estos vehículos, dinamizadores de la economía regional y nacional se les encarecen sus costes -se les impide abandonar la AP-68 para avituallamientos, repostajes y descansos- deberían poder trasladarlos a sus clientes». De cualquier forma, Seviprefor considera que «La Rioja pierde competitividad y atractivo económico empresarial».

Apuestan porque el desvío sea voluntario y no obligatorio ya que «se trata de una vía que discurre a lo largo de un eje económico y, por tanto, debería primar la convivencia y el respeto entre los usuarios». Y plantean otras alternativas al veto que, en su opinión, cumplirían el mismo objetivo sin que tengan impacto negativo, como restringir los adelantamientos o limitar la velocidad a 80 km/h.

En este contexto, entienden que la medida debe ser anulada o cuando menos flexibilizada permitiendo que los camiones puedan abandonar la AP-68 para repostar porque «se traduce en ahorro económico para las empresas de transporte», también para descansar y comer «porque disminuye su carga mental».

Por último, entienden que se debe permitir, en el peor de los casos, que los vehículos pesados abandonen la AP-68 por la salida más próxima a su destino, ya sea para descansar o repostar. «Es algo tan lógico y de sentido común, que los vehículos cargados con mercancías peligrosas lo tienen permitido pese a tener que transitar por recorridos específicos, a pesar del elevado riesgo que suponen para la circulación por el tipo de carga que transportan», concluyen. Fuente original: larioja.com