Opinión

“Cabeza de ratón". Por Manuel Pérezcarro Martín

“Cabeza de ratón". Por Manuel Pérezcarro Martín

El protagonismo mezclado con una fuerte dosis de personalismo nos puede conducir, en cualquier situación de la vida, a la insignificancia.

Lo hemos visto en los partidos políticos, por ejemplo. ¿Se acuerdan ustedes de Rosa Díez? Mucha gente de distinto signo la consideraba una gran política, de firmes convicciones y sin pelos en la lengua. Pero se perdió para la política y se desperdició su talento en el servicio a España seguramente, y es mi humilde opinión que expreso con todos mis respetos hacia ella, por su falta de humildad y un excesivo personalismo y protagonismo, dejando su partido político UPyD en la irrelevancia.

Estos mismos males afectan a otros políticos en la actualidad; pero yo no quiero hablar de personalismos en la política, ni de otros ámbitos de la vida, sino en el asociacionismo.

Lo vengo diciendo desde hace tiempo y ahora se confirma con las recientes elecciones al Comité Nacional del Transporte.

De la Confederación Española de Transporte de Mercancías, CETM, se desgajaron en un determinado momento, la Asociación del Transporte Internacional por Carretera, ASTIC, y la Asociación Española de Empresarios de Transporte bajo Temperatura dirigida, ATFRIE.

Más tarde, se separaron de esta confederación, tres asociaciones provinciales, las de Guipúzcoa, León y Soria y constituyeron FITRANS.

Pues bien, es una verdadera lástima que ASTIC, que es la más antigua de las organizaciones empresariales de transporte españolas, remontándose sus orígenes al año 1960 y dice ser líder en el sector, al menos así se anuncia en su página web, tan solo represente el 6,54 por ciento de las empresas de transporte internacional. Es también para hacérselo mirar que ATFRIE haya alcanzado únicamente una representación mínima y en la sección de almacenistas-distribuidores y también afirma ser la asociación empresarial más representativa de los empresarios de transporte frigorífico.

Por su parte, FITRANS, ha desaparecido del Comité Nacional en la sección de transporte, obteniendo únicamente una pequeña representación en agencias de carga completa.

Puede que alguien se moleste por lo que digo, no es mi intención en absoluto, pero los datos están ahí. Tampoco me alegro por ello, esto no es bueno para el sector porque nos hace más débiles y de esta debilidad se están aprovechando otros.

A veces parecemos una jaula de grillos, manifestando opiniones distintas o yendo cada uno por su lado sin tener en cuenta el interés general que, al final, es el de todos.

Lo hemos visto lamentablemente en el paro o desvío de camiones convocado en protesta por el peaje establecido por la Diputación Foral de Guipúzcoa o en las diferentes posturas mantenidas respecto de la aplicación de la Directiva sobre Desplazamiento de Trabajadores.

Este afán de notoriedad, de querer ir por libre sin contar con el consenso de la mayoría, de intentar formar una especie de lobby independiente que trata de sobresalir de los demás sin ninguna razón lógica conduce a errores.

Lástima que estas actitudes, arrastren a importantes asociaciones hasta dejarlas caer en la insignificancia, con el sector al que dicen representar que no se identifica con las mismas y ven en ellas más que una asociación, un club para la defensa de los intereses particulares de unos pocos.

Todavía hay tiempo para rectificar. Conciliemos, pues, posturas y pensemos solamente en los intereses generales del sector. No queramos ser cabeza de ratón que nos estaremos equivocando.

Manuel Pérezcarro Martín. Secretario General