El precio de ser independiente
En los tiempos que corren, ser independiente es mucho más complicado de lo que a simple vista pueda parecer. No es fácil mantener una línea editorial, que acertada o no, sea siempre la misma. Publicando aquellas noticias que uno considera interesantes en este complicado mundo del transporte. Más que nada porque, en esta España nuestra, no se suele perdonar el mantener un criterio propio. Hasta el punto que llegamos a juzgar a cualquiera en eso de "o eres de un lado o eres del otro", pero nunca de un punto intermedio.
Desde su nacimiento en noviembre de 2015, Diario de Transporte ha procurado siempre mantener la línea editorial que se marcó desde el principio, que no es otro, que ser el portavoz público de los profesionales del transporte, en todos sus campos, procurando publicar tanto noticias propias, como aquellas que consideramos interesantes, para el público que creemos honradamente que merece tener una voz propia y pública, que hasta ese momento no tenía.
Sencillamente porque tenemos claro que está abandonado a su suerte, apartado de los medios informativos del transporte tradicionales, más preocupados por mantener una línea editorial "oficialista", anclada en cuidar un mercado publicitario que les proporciona los ingresos suficientes para subsistir. En cambio Diario de Transporte se ha mantenido en su propia línea, sin estar dentro de las reglas establecidas. Publicando noticias incómodas, exclusivas que los incrédulos de turno no se creían hasta que las veían resumidas en los medios tradicionales. Opiniones de profesionales que están a diario en la carretera, respetando la libertad de expresión a la que tiene derecho todo el mundo. Siempre desde el respeto y la educación. Generando debates muy interesantes para un sector que parece acomodado y más preocupado por mirar hacia otros lados, como no queriendo ver la realidad. Apoyado por un grupo de lectores y amigos que nos enviaban enlaces y noticias de las que tirar para intentar ser los portavoces incómodos de un sector muy atomizado. Buscando siempre mantener informados de las últimas novedades a los profesionales del volante. Aun a riesgo de muchos disgustos y de perder ingresos publicitarios.
No negamos que no intentemos tener esos ingresos por publicidad, pero de un modo mas tradicional y menos rentable. En este tiempo hubo intentos de comprar parte de Diario de Transporte ante los rumores de nuestras dificultades económicas, pero nos hemos negado a esos intentos de compra, sencillamente porque suponían perder nuestro bien más preciado, la independencia editorial. No queremos escribir y publicar noticias al dictado de nadie. Antes de llegar a eso preferimos empeñarnos hasta la coronilla y sobrevivir como "gato panzarriba". Sencillamente porque tenemos muy claro que acabaremos triunfando. Aunque sea a base de mucho esfuerzo y de muchas horas de trabajo. Teniendo para sobrevivir con lo justo, nos damos por más que satisfechos.
Evidentemente no podemos gustar a todo el mundo, ni mucho menos lo pretendemos. Tenemos claro que siempre habrá quien nos critique, nos ponga a caer de un burro y nos trate de poco menos que de demonios y malditos. Como también hubo, hay y habra, quien nos ponga todo tipo de obstáculos. No tan solo en las redes sociales, con bloqueos y denuncias en facebook. Ataques informáticos, como el que estamos sufriendo desde hace unos días, y lo que vendrá. Allá ellos con sus neuras. Pero a diferencias de otras páginas, con las que se nos compara, tachándonos de sensacionalistas, de publicar noticias tristes, accidentes y demás, Diario de Transporte cumple con la Ley. Está registrado legalmente, paga sus impuestos como cualquier otra empresa, y tiene toda la documentacion en regla que requiere una editorial dedicada a la prensa y la edición de libros.
También hay quien nos critica de no conocer la realidad del transporte, de no saber del tema. Evidentemente no nos consideramos en posesión de la verdad absoluta. Pero si arrastramos sobre nuestras espaldas muchos años de experiencia en la carretera al volante de un camión, y los que nos quedan. Una vez más, allá cada cual con sus propias pajas y elucubraciones mentales. Nuestra conciencia está muy tranquila y seguimos adelante porque tenemos muy claros nuestros objetivos.
Nos equivocamos y aprendemos cada dia. Porque afortunadamente somos humanos, y esperamos seguir siéndolo siempre para que nunca se nos olvide de donde venimos y hacia dónde vamos. Diario de Transporte, es y seguirá siendo el portavoz público de los profesionales del transporte en todos sus campos. Sus páginas siempre estarán abiertas para nuestros lectores, en las que podrán hacer públicas sus inquietudes y dudas, para conseguir que nuestra profesión sea cada día más reconocida y respetada por esa parte de la sociedad que desconoce la verdadera realidad del día a día del transporte desde dentro. Como siempre ¡¡¡BUENA RUTA!!!. @Camioneroleones.
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