Un camión portugués que iba a Cantabria acaba atascado en... Nestares (fotos)

Un camión portugués que iba a Cantabria acaba atascado en... Nestares (fotos)

El vehículo quedó atrapado durante una hora y media en la entrada de la localidad riojana, hasta que los vecinos de la localidad le ayudaron a salir. Ha vuelto a pasar: un camión extranjero, viajando por territorios desconocidos, con un destino más o menos lejano y que acaba atascado en un rincón de La Rioja por culpa del GPS. La última vez (o la penúltima, habría que decir) ocurrió este lunes, en la localidad serrana de Nestares.

Allí, propios y extraños alucinaron con lo que estaba pasando: un tráiler de gran tamaño intentaba maniobrar en la entrada a la pequeña localidad, con tan mala fortuna que sólo consiguió quedarse totalmente atascado; el transportista, desesperado, no conseguía ya mover el tráiler ni en una ni en otra dirección.

¿Dónde iba un tráiler tan grande por la estrecha entrada a un pueblo por el que habitualmente no circulan semejantes 'monstruos'? Pues a ningún sitio. O, mejor dicho, a otro sitio bastante lejano: el camión, de una empresa portuguesa y conducido por un transportista de la misma nacionalidad, debía encaminarse a la localidad cántabra de Nestares. Pero la coincidencia de nombre y el GPS (y una buena dosis de despiste, habrá que concluir) condujeron al camionero hasta La Rioja.

Muchos vecinos colaboraron con sus indicaciones para liberar al camión    Muchos vecinos colaboraron con sus indicaciones para liberar al camión    Muchos vecinos colaboraron con sus indicaciones para liberar al camión

Y allí, entre los árboles de la entrada, quedó varado sin aparente remedio. Según cuentan testigos presenciales, el camión quedó atorado pasadas las tres de la tarde; al 'rescate' acudieron vecinos de la localidad y de Torrecilla, entre ellos un camionero jubilado, que con sus indicaciones fueron poco a poco consiguiendo hacer maniobrar al transportista en el estrecho espacio de la vía. "Pasaba a diez centímetros de los árboles".

Al final, tras hora y media de maniobras, el camión quedó libre y pudo seguir viaje. "El hombre lloraba de la emoción" cuenta un testigo. "Al final todo el pueblo se involucró en ayudarle, aunque la verdad es que conducía muy bien". Ni el camión ni los árboles sufrieron daños.

Fuente: larioja.com