¿Cuántas muertes más necesitan?
@Camioneroleones.- El desgraciado accidente mortal en el que se han visto implicados dos camiones esta mañana en el kilómetro 336,5 de la carretera nacional 232; en el que han perdido la vida dos camioneros-compañeros, convierte a esta carretera en una de las más trágicas y peligrosas de España. Sobre todo porque soporta todo el tráfico de camiones que transcurre entre Zaragoza y Logroño, con la excepción -si acaso- del tramo navarro que es por autovía. Peligroso y trágico, no sólo para los profesionales de transporte, también para el resto de personas que viajan por ella.
Pero no se trata aquí, de hacer ahora de ingeniero de caminos canales y puertos. Se trata simplemente de lanzar una importante pregunta convertida en no menos trágica duda ¿Cuántas muertes más necesitan? pero alargándola más, llegando a preguntar a los responsables de infraestructuras, sean regionales, estatales, autonómicos e incluso europeos... ¿Para darse cuenta de la necesidad de liberar la autopista AP-68 o construir una autovía alternativa?
Sí, porque en este país nuestro, dividido por arte del mapa autonómico en 17 Comunidades Autónomas, más las ciudades de Ceuta y Melilla, a veces parece una especie de reino lleno de reinos de taifas en el que impera más el desgobierno y el descontrol que lo que en realidad debería de importar, y que no es otro, que el bien -por encima de todo- de los ciudadanos y ciudadanas que los habitan. Sí, aún a riesgo de recibir las correspondientes críticas, por mucho que uno sea partidario de un Estado Federal. Pero en condiciones, no como el actual.
Pero sin entrar en cuestiones políticas, que no es el caso, considero sinceramente que ¡¡YA ESTA BIEN DE TANTAS MUERTES QUE SE PODRÍAN HABER EVITADO!!. Por mucho que en el desafortunado accidente de hoy se debiera, como casi siempre, a un error humano. Pero una cosa es el error y otra muy diferente las consecuencias de los mismos. Sobre todo en esta España en la que ha imperado el despilfarro hasta el extremo. Sobrado ejemplo tenemos en la actualidad, con el caso de las autopistas que serán rescatadas con el dinero de nuestros bolsillos, para volver a privatizarlas a riesgo, casi seguro de que estarán encaminadas a una nueva ruina que volveremos a pagar todos los españoles.
En un país como este, que asombra en Europa por sus carreteras, es incomprensible que se volvieran a conceder las explotaciones privadas de las autopistas por gobiernos anteriores, una vez caducada su concesión, por otros 25 años más. Cuando estaban más que amortizadas y lo legal y honrado que debería haber hecho el Gobierno de entonces, era convertirlas en vías libres de peajes. Pero no, seguiremos como siempre, que no cambiaremos nunca, ni mucho menos aprenderemos de los errores, por más que se den los gobernantes golpes de pecho. Aquí seguirá imperando el interés económico de las grandes empresas, y de políticos enganchados a las puertas giratorias de sillones en multinacionales, sobre el interés y el bienestar de los españoles.
Así que ya les vale, ¡Ya está bien de muertes que se podrían haber evitado!. ¡Basta de mirar más al bolsillo que a la seguridad de los ciudadanos!. Porque una vez más, a este juntador de palabras cargado de benditas dudas le surge otra pregunta, una que quiero hacer a los responsables y encargados de nuestra seguridad vial, sean del color político que sean, ¿Cuanto vale tan solo una vida humana inocente que se pudiera haber evitado? Sí, tan solo una, seguramente incalculable, pues imaginense a las que lleva trágicamente encima esta fatídica carretera Nacional 232. Eso por hablar tan solo de esta. Desde aquí enviar mi Más sentido pésame y solidaridad a las familias de los dos camioneros-compañeros fallecidos esta maldita mañana en el kilómetro 336,5 de esta nefasta carretera. Para el resto como siempre ¡¡¡BUENA RUTA Y MEJOR REGRESO!!!.
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