El TS confirma la deuda del Gobierno de Navarra por la Ciudad del Transporte

El TS confirma la deuda del Gobierno de Navarra por la Ciudad del Transporte

El Tribunal Supremo español ha confirmado el auto de febrero de 2016 del Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN) que establece que el Gobierno navarro debe abonar una indemnización de 48,5 millones de euros a los propietarios de los terrenos sobre los que se construyó la Ciudad del Transporte porque cuando en 2008 se hicieron las expropiaciones –bajo mandato de UPN– se tasaron en un precio inusualmente bajo.

La sentencia, que el Supremo hizo pública el pasado 12 de enero y que es firme, ha rechazado el recurso presentado por el Gobierno navarro, cerrando así un largo periplo judicial que se inició en 2008, cuando los propietarios no se conformaron con el precio fijado por el Jurado de Expropiación de Navarra de 20,01 euros por metro cuadrado. Los propietarios recurrieron y la Sala de Navarra dio inicialmente la razón al Jurado de Expropiación. Ante esta situación, los propietarios volvieron a recurrir al Supremo, que estimó los recursos en diciembre de 2012 y declaró el derecho a recibir un justiprecio.

Este justiprecio fue fijado por la Sala de Navarra en 53,06 euros el metro cuadrado en unos casos y en 57,09 euros el metro cuadrado en otros. El Gobierno navarro, entonces dirigido por UPN, recurrió estas decisiones judiciales. En febrero de 2016, ya con Uxue Barkos como presidenta del Gobierno, el TSJN dio a conocer su auto, que se posicionaba a favor de los propietarios. El Supremo ahora ha confirmado ese auto.

El Gobierno navarro abonó en el momento de la expropiación de los terrenos para construir la Ciudad del Transporte 20,2 millones de euros correspondientes al precio de 20,01 euros el metro cuadrado. Tras la sentencia está obligado a pagar a los propietarios de los terrenos 68,5 millones de euros, por lo que aún debe abonar la cantidad de 48,3 millones.

Al conocerse el auto que el TSJN hizo público en febrero del año pasado, la entonces portavoz del Gobierno navarro, Ana Ollo, lo calificó como «una herencia envenenada [de UPN] que se une a otros procesos que este gobierno ha ido encontrando en estos meses de legislatura, como las reclamaciones por daños y perjuicios en torno al pabellón Navarra Arena (5,1 millones), los 180 millones comprometidos para financiar deuda y los peajes en la sombra, entre otras cuestiones».