Los terroristas llevaron bombas al aeropuerto de Bruselas en taxi

Los terroristas llevaron bombas al aeropuerto de Bruselas en taxi

Varios medios belgas coinciden en señalar que los terroristas recurrieron a un taxi para transportar alguna de las bombas que detonaron en el aeropuerto y el metro de Bruselas . Tras los atentados, el chofer del taxi que los llevó a Zaventem guió a la policía hasta el domicilio de los presuntos suicidas, donde encontraron otro artefacto explosivo.

Al menos tres coches sirvieron a los presuntos terroristas de Bruselas para cometer el doble atentado en la capital belga: un taxi, un Renault Clío y un Audi S4 negro, según informó el diario “La Libre Belgique”. El rotativo afirma que los sospechosos no llegaron al aeropuerto internacional de Zaventem, en Bruselas, en tren, sino en coches, según la investigación de los atentados, en los que fallecieron al menos 34 personas y más de dos centenares resultaron heridas.

El conductor del taxi, tras ver las fotografías de los sospechosos, condujo a la policía belga a la vivienda en Schaerbeek en la que se encontró un artefacto explosivo, productos químicos y una bandera del grupo terrorista Estado Islámico (EI). Al taxista le extrañaba que los hombres no le dejaran ayudarles con las maletas, en cuyo interior estaba el material explosivo, según varias fuentes. Dos de los sospechosos, tras depositar sus maletas y bolsas de viaje en un carrito de portaequipaje hicieron estallar dos artefactos.

Los tres llegaron al aeropuerto en taxi, según la versión de la agencia de noticias Belga, que cita como fuente al alcalde de la ciudad de Zaventem. Otros medios, como DH, indican que un error de la centralita de la compañía de taxis pudo haber salvado muchas vidas. Según este periódico belga, los presuntos terroristas habían solicitado una furgoneta y, en cambio, se les envió una berlina, en la que no cabían las cinco maletas y por eso tuvieron que dejar más maletas en casa.

Según DH, una de las maletas que no fue cargada en el taxi contenía una bomba de muchos kilos y con una carga inestable que acabó siendo detonada por los artificieros de la policía belga en una operación de riesgo, en el domicilio de Schaerbeek que habría alquilado la célula terrorista. Inmediatamente después de los atentados, varios testigos destacaron la presencia de un vehículo marca Audi de color oscuro sin matrícula con tres o cuatro individuos en su interior.

Según “La Libre Belgique”, la pista conduce a una persona de Limburgo, en la provincia de Lieja, que solo tiene 22 años y que ya estuvo bajo observación de los servicios de inteligencia el año pasado. El propietario del Audi S4 visto en Zaventem pertenece a la comunidad turca y es conocido por los servicios belgas por haberse ido el año pasado a Arabia Saudí, de acuerdo con el mismo diario.

Identificado solo con la sigla A, viajó allí junto con tres otras personas de Limburgo, de 22, 25 y 26 años, y de un hombre de Amberes de 33 años, de origen marroquí. Los datos del Audi fueron trasladados rápidamente, al igual que los de un Renault Clío, a las autoridades en las fronteras francesa y luxemburguesa, así como alemana y holandesa, indica el diario.

Las personas que estaban dentro del Audi no se bajaron en el aeropuerto, donde hubo dos explosiones, sino que se volvieron a Bruselas, según la misma fuente. El diario se pregunta si se trata del segundo equipo de kamikazes, el que fue trasladado a Woluwe-Saint-Lambert, uno de los municipios de la Región Bruselas-Capital, dedicado a acometer el segundo atentado en el metro de Maelbeek.

Agencias

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