Pemisatrans contra Primafrio: "Dos tipos le amenazaron de muerte para que se bajara del camión"
Todas las rutas de los camiones presuntamente sustraídos fueron capturadas por el GPS y conducían hasta el polígono industrial de La Serreta. No se trataba de una mera coincidencia, a tenor de los testimonios que recogen las denuncias que personal de Pemisatrans, con sede en Águilas, ha interpuesto ante la Guardia Civil y Policía Nacional contra la empresa Primafrio, ubicada en el citado polígono de Molina de Segura, y a la que acusa de robarle supuestamente ocho cabezas tractoras y cinco remolques.
«Recibió una llamada de un chófer que estaba esperando con uno de los camiones de la empresa, para cargar en el polígono de Águilas, diciéndole que se habían presentado dos tipos, quienes le habían amenazado de muerte con barras de hierro, para que se bajara del camión o si no lo mataban. Le dijeron que eran trabajadores de la empresa Primafrio y que venían a llevarse el camión», recoge una de las denuncias. «El conductor dijo que iba a llamar a su jefe y los dos tipos le rompieron el teléfono móvil. Entonces se bajó y les entregó el camión».
Pemisatrans y Primafrio venían suscribiendo, desde diciembre de 2014, distintos contratos por los que la primera empresa llegó a arrendar quince camiones. Por su parte, la firma molinense -propietaria de las cabezas tractoras- abonaba los portes que la empresa aguileña le hacía. Pero la relación comercial se rompió el 3 de febrero tras esas denuncias por robos en los polígonos de El Labradorcico de Águilas y Saprelorca, en la estación de servicio La Morena de Huércal Overa (Almería) y en la carretera de Barqueros en Alcantarilla.
En otra denuncia, el responsable de Pemisatrans relata a la Policía Nacional el robo de una cabeza tractora y un remolque «cargado con mercancía de huevos», que un empleado estacionó en una vía de servicio de Alcantarilla. En el polígono lorquino, su flota siguió menguando al perder dos camiones y los remolques fueron objeto de actos vandálicos. «Desengancharon el remolque, que fue el que destrozaron y al que le pincharon las ruedas».
La última denuncia fue presentada el día 5 y expone que un chófer salió de Holanda rumbo a Barcelona, pero que «no puede contactar telefónicamente con el conductor». El GPS indicaba que el camión se estaba desplazando por la autovía A-7, por lo que «sospecha que a este vehículo le pueda ocurrir lo mismo». En todas las denuncias asegura que «desconoce los motivos» de los supuestos robos. El despacho de abogados Lorenzo Peñas Roldán, que representa a Pemisatrans, defiende que su cliente no ha incumplido el contrato de arrendamiento. «Sigue vigente». El bufete solicitará «la acumulación de las denuncias para que un juzgado lo investigue todo».
El representante legal de Primafrio subraya que los vehículos «son propiedad» de la empresa molinense y niega los robos. «Hay un impago de rentas de los alquileres, esa empresa está en quiebra y hay embargos de la Agencia Tributaria». El letrado detalla que Pemisatrans adeuda 169.000 euros de los alquileres desde antes del verano de 2015. «Tenían que devolver los camiones desde el pasado noviembre y le quitaron los rótulos a algunos vehículos».
En este sentido, recuerda que los contratos de arrendamiento están resueltos vía burofax porque «es imposible contactar con ellos». Primafrio interpuso el día 5 una denuncia en la Comisaría de Policía Nacional, por supuesta apropiación indebida, contra Pemisatrans. El pasado jueves, la empresa aguileña perdió otro camión en el polígono Saprelorca y el GPS se apagó a la altura de La Hoya. Esta inquietante desaparición todavía no ha sido denunciada.
Jorge García Badía. La Verdad.es
