Las nuevas concesiones de autobuses a larga distancia abaratarán las tarifas

Las nuevas concesiones de autobuses a larga distancia abaratarán las tarifas

Los vizcaínos pagarán menos gracias a la fuerte competencia: los billetes a Logroño ya han bajado un 30%. Andoni Gutiérrez es un bilbaíno que trabaja en Logroño. Todos los días se desplaza entre ambas ciudades para ganarse el pan como mecánico especialista. Antes utilizaba su coche, pero desde el pasado mes de mayo se mueve en autobús.

¿El motivo de este cambio? «El servicio ha mejorado mucho», afirma. «Ahora hay una salida a primerísima hora de la mañana, lo que me permite llegar a tiempo a mi puesto. Además, es mucho más barato que antes». El desembarco de la compañía Autobuses Cuadra en esta importante ruta para Bizkaia ha supuesto una reducción en el coste del billete cercano al 25%. El precio ha pasado de 13 a 10 euros por trayecto. Y, no sólo eso, hay una media de 9 servicios diarios frente a las cinco que ofertaba el anterior operador.

El concurso público que renovó esta concesión se resolvió por unas décimas de diferencia hace tres meses. Concurrieron 13 empresas. La feroz lucha ha supuesto una mejora evidente para los usuarios. «Además de más barato, nuestro servicio ha incorporado un montón de mejoras:_compra de billetes por internet o aplicaciones móviles, máquinas expendedoras las 24 horas, autobuses último modelo, con entretenimiento a bordo...», asegura Idoia Cuadra, gerente de la nueva concesionaria. La modernización ha sido «evidente», antes los billetes no se vendían ni siquiera numerados. Cada uno cogía asiento donde buenamente quería o podía.

13 rutas nacionales de largo recorrido pasan por Bilbobus.

Gracias a ellas es posible viajar a la mayoría de capitales de provincia o ciudades importantes de la Península: desde Santiago, Vigo, Pontevedra hasta Gijón, Santander, Zaragoza, Sevilla, Málaga, Córdoba, Valencia, Benidorm, Tarragona, Barcelona, Madrid, Burgos, Cáceres o Palencia. Sin olvidarse de los destinos más cercanos, como Logroño, Vitoria, San Sebastián o Pamplona.

Sin datos

El número de viajeros que se mueven entre Bilbao y los principales destinos sigue siendo uno de los secretos mejor guardados por las empresas concesionarias. Las cifras no son de dominio público. El Ministerio de Fomento informa de los clientes totales de una concesión, pero no los segmenta por trayectos. Por ejemplo, no se sabe cuántos viajeros que llegan a Madrid en la ruta Irún-Madrid proceden de Gipuzkoa y cuántos de Bizkaia.

Ocio a bordo

Los nuevos autobuses incorporan multitud de adelantos, como wifi o servicio de entretenimiento a bordo (películas, series...).

La ruta Bilbao-Logroño es la primera de una serie de recorridos que tendrán que salir a licitación pública en menos de dos años. Muchas de las grandes concesiones llevan varios años caducadas, pero diversos problemas legales han impedido su renovación. Hay trayectos en los que el mismo operador –o una empresa ‘heredera’– lleva desde los tiempos del franquismo. «Ahora se abre una buena oportunidad para reordenar el sector y para que los ciudadanos puedan gozar de mejores servicios y más económicos», apunta Rafael Barbadillo, presidente de Confebus, la patronal del sector.

Desde Bilbao parten o pasan a diario 13 grandes líneas de medio o largo recorrido. Nueve de ellas son competencia del Ministerio de Fomento, al atravesar más de una comunidad, mientras que las otras cuatro están en manos de las diputaciones vizcaína, alavesa y guipuzcoana. De todas ellas, hay ocho que están caducadas o pendientes de renovación inminente. Son las que unen Bilbao con Laredo, Gijon y Santiago de Compostela; Valladolid, Salamanca y Cáceres; Benidorm, Valencia y La Manga; Pamplona; Vitoria; Villarcayo, Burgos y Madrid; Benavente y León; y Zaragoza y Barcelona, entre otros destinos.

La mayoría de ellas están en manos de Alsa, uno de los gigantes de este negocio. Algunas rutas son cruciales, como la que une Bizkaia con la capital o la que atraviesa todo el cántábrico en dirección a Galicia. En todas ellas se espera una batalla feroz entre las aspirantes. Hay empresas, por ejemplo, que están prestando el servicio ya con ofertas de fidelización o vía web, así como con precios por debajo de lo que fijan las concesiones, porque son importes que se han quedado obsoletos. No son competitivos.

Bajas de hasta el 48%

Tan grande es la lucha que en la renovación de la concesión entre Madrid y Segovia se han realizado ofertas un 48% a la baja. En todo el país, incluido Euskadi, hay un grupo de empresas del sector que se han dedicado al transporte escolar u otro tipo de servicios y que llevan «años» preparándose para este momento. «Para nosotros, es una muy buena oportunidad», reconoce la gerente de Cuadra. «Al usuario le interesa que los concursos salgan cuanto antes para beneficiarse de un mejor servicio y de mejores precios», sostienen desde la patronal.

Los empresarios también están convencidos de que las nuevas reglas de juego permitirán hacer más atractivo el autobús, que viene de pasar un profundo bache por la crisis. A su juicio, abaratar los costes y mejorar la calidad les posibilitará atraer a nuevos nichos de mercado (como el caso del mecánico que abría este reportaje) y luchar contra la nueva competencia tecnológica, como Bla Bla Car.

Fuente: elcorreo.com