Otro maquinista de Renfe abandona un tren porque había terminado su jornada laboral

Otro maquinista de Renfe abandona un tren porque había terminado su jornada laboral

Los 80 viajeros del tren de la línea Valencia-Teruel-Zaragoza se quedaron tirados este viernes en la estación de la capital turolense porque, sin previo aviso, el maquinista abandonó el convoy al haber terminado su jornada laboral y no estar el sustituto.

RENFE asegura que el conductor que tenía que hacer el relevo al maquinista estaba enfermo. Y como mejor solución fletó dos autocares para trasladar a los pasajeros por carretera antes de hacerles esperar horas en la estación de Teruel. La explicación no ha convencido ni a los viajeros afectados, que aseguran que nadie les dijo nada, ni a los sindicatos ni a la Plataforma en Defensa del Ferrocarril, una entidad integrada por diferentes colectivos sociales y laborales.

Una de las reivindicaciones de la famosa plataforma "Teruel existe" era precisamente la mejora de las comunicaciones por ferrocarril. Se han celebrado manifestaciones, escenificaciones de época y concentraciones, con la presencia de los alcaldes de las tres ciudades, para denunciar su situación. Los trenes que comunican la capital turolense con Valencia y Zaragoza sufren constantes retrasos y averías a causa del mal estado de la vía y del uso de convoyes conocidos como Tamagotchi.

Según la citada Plataforma, estos percances unidos al plantón del viernes son "un agravio más" para disuadir a los pasajeros a viajar por la línea Valencia-Teruel-Zaragoza.Los sindicatos y la Plataforma achacan el incidente del viernes a la escasez de la plantilla de maquinistas en Teruel. En los últimos veinte años se ha perdido la mitad del personal destinado a la capital turolense. Aseguran que se ha producido un recorte paulatino y las vacantes por jubilación o traslado no se cubren.Las previsiones son que a final de este año la plantilla sea solo de 20 conductores.

La normativa laboral exige que los maquinistas no trabajen más de cinco horas y media seguidas, por lo que se necesita más personal para hacer los relevos.Este suceso es similar al ocurrido hace tan sólo dos semanas, cuando se quedaron tirados 109 pasajeros que viajaban a bordo del Alvia que cubría el trayecto entre Santander y Madrid. En principio, el tren debía llegar a la capital a las 23.15 horas de la noche, pero a la altura de Osorno (Palencia) el conductor detuvo la máquina y dejó los mandos de control porque su jornada laboral había concluido.

Fuente: elmundo.es