Investigada una empresa de transportes turca por evadir 170 millones de euros

Investigada una empresa de transportes turca por evadir 170 millones de euros

Después de una intensa investigación llevada a cabo por una brigada de la Guardia de Finanzas de Italia sobre las actividades de una empresa turca, de la que por el momento se desconoce su nombre. Esta empresa con sede en Turquía un con una oficina de representación en la localidad italiana de Trieste, habría llevado a cabo, desde que inició su actividad, un fraude contra la Hacienda italiana por un importe superior a los 107 millones de euros.

Esta empresa operaba dentro del territorio italiana por medio de una compleja estructura, lo que ha dificultado aun más las investigaciones de los agentes de finanzas. Esta empresa se había registrado legalmente en la Cámara de Comercio de la localidad de Trieste, en la que contaba únicamente como una oficina de representación de la empresa, con el objetivo de la contratación de transportes dentro de Italia. Una actividad que le eximía de muchas obligaciones fiscales y contables.

En cambio los agentes de la Guardia de Finanzas descubrieron en su investigación, que en realidad realizaba otras actividades mucho más complejas, después de realizar un exhaustivo análisis sobre los clientes y proveedores de la empresa, por lo que han llegado a la conclusión de que, la oficina de la empresa, era en realidad un punto ficticio en el que se llevaban a cabo otro tipo de negocios que si estaban sujetos a los controles fiscales del Ministerio de Hacienda de Italia, y por lo tanto, al pago de los impuestos correspondientes.

La empresa turca realizaba en realidad servicios agencia de logística  y transportes por carretera que vendía a otras empresas extranjeras, como muestra la documentación incautada. Donde se demuestran actividades administrativas, financieras y de negocios, que producían unos beneficios económicos que era evadidos a la sede central de la empresa. Evitando así, el pago de los impuestos que debería haber pagado en Italia. Las investigaciones revelaron una evasión de impuestos de más de 170 millones de euros entre los años 2010 al 2014.