Opinión

Radiografía de una injusticia más en el transporte. Carga y descarga de los camiones por los propios camioneros

Radiografía de una injusticia más en el transporte. Carga y descarga de los camiones por los propios camioneros

Operaciones de carga de las mercancías a bordo de los vehículos, así como la descarga de estos por los conductores, en los centros de trabajo de clientes de cargadores y logísticas, tras horas de conducción y en sus periodos de descanso. Una obligación no escrita que puede costar el puesto de trabajo o el servicio al camionero en caso de negarse justamente a realizar una tarea que realmente compete al cargador o al destinatario.

Campaña contra la carga y descarga por los camioneros:  Lo que la ley dice al respecto y lo que se puede hacer para cambiarla

En la Ley de Contrato de Transporte de Mercancías Terrestres, Ley 15/2009, de 11 de noviembre. En su artículo 20 (sujetos obligados a realizar la carga y la descarga del camión) podemos leer:

Las operaciones de carga de las mercancías a bordo de los vehículos, así como la descarga de estos, serán por cuenta, respectivamente, del cargador y del destinatario. Salvo que expresamente se asuman estas operaciones por el porteador antes de la efectiva presentación del vehículo para su carga o descarga. Igual régimen será de aplicación respecto de la estiba y desestiba de las mercancías.

El cargador y el destinatario soportarán las consecuencias de los daños derivados de las operaciones que les corresponda realizar de conformidad con lo señalado en el párrafo anterior.

La propuesta de modificación sobre este artículo para evitar esta lacra establecida tácitamente por los usos y costumbres ha de ser esta:

1.- Las operaciones de carga de las mercancías a bordo de los vehículos, así como la descarga de estos, serán por cuenta, respectivamente, del cargador y del destinatario. En modo alguno el porteador asumirá estas operaciones. Igual régimen será de aplicación respecto de la estiba y desestiba de las mercancías.

Un conductor que efectúa o va a efectuar una conducción prolongada no se le puede exigir, por motivos de seguridad, que efectúe la carga/estiba o desestiba/descarga del vehículo, por mucho que su empleador o cliente pretenda pactar lo contrario. En la práctica esto no es así poniéndose en riesgo la seguridad vial y obligando a los trabajadores a efectuar labores para las que no han sido formados ni contratados.

Por otra parte, debido a que actualmente la mayoría de los conductores realizan las operaciones de carga y descarga, la responsabilidad de los daños derivados de estas operaciones recae sobre el mismo. Esto quiere decir, el seguro del cargador o del destinatario no cubre los daños a las personas o las cosas. Este hecho puede derivar en una serie de consecuencias no deseadas cuando se producen roturas o pérdidas en la mercancía e incluso responsabilidades civiles y/o penales cuando estos daños son causados a las personas en las operaciones de carga/estiba o desestiba/descarga.

Independientemente se han de seguir los protocolos prescritos en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, en especial en lo relacionado con la Coordinación de las Actividades Empresariales, que hoy por hoy no se respetan en la mayoría de los casos, una vez que el vehículo entre en las instalaciones del empresario principal.

Por otra parte los convenios colectivos del sector recogen la figura de mozo de almacén cuyas labores son principalmente la carga y descarga de la mercancía, así como su ubicación en las instalaciones de su puesto de trabajo e incluso clasificación de la misma si así lo establece su contrato. Cada vez que un conductor realiza estas tareas o parte de las mismas está supliendo la figura del mozo de almacén, con lo que ello repercute en el empleo de estos trabajadores especializados.

Muchos transportistas recurren al uso de las transpaletas mecánicas o maquinaría a motor para las operaciones de carga y descarga de su vehículo, incluso aunque no posean el título habilitante de carretillero ni la formación del mismo, con lo que las probabilidades de accidente o incidente son mucho más elevadas y sus consecuencias trágicas.

Especialmente importante sería el capítulo referido a la vigilancia del cumplimiento de las modificaciones propuestas para la ley, medios y preparación para los responsables de proteger los derechos y la salud laboral, evitando así la picaresca que vuelva a colocar a los conductores en la misma situación que hoy por hoy les obliga a cargarse y descargarse.

Un negocio surgido de la injusticia

Años atrás algún transportista aceptó por cortesía ofrecer a su cliente el servicio de la carga o descarga de la mercancía. Este hecho acabó por imponerse y se convirtió en una costumbre “no escrita”. Más tarde esta actitud se extendió entre las diversas agencias de transporte empujando con amenazas diversas a sus conductores para obligarles a realizar estas tareas so pena de ruptura de contrato en caso de autónomo o despido en caso de trabajador asalariado. Hoy en día la mayoría de conductores han asumido la carga y descarga como parte de su trabajo dentro de la jornada laboral diaria.

Por otro lado se viene ofreciendo descuentos en el precio del porte por la inclusión de la carga y descarga de la mercancía, por parte del porteador, como parte del servicio ofrecido por algunas agencias de transporte o intermediarios de dicho porte.

Es más, se está extendiendo una costumbre execrable que es la de que en algunos centros de trabajo, donde el conductor se ve obligado a realizar estas tareas, el empresario pone a disposición de estos las carretillas eléctricas previo pago de una cantidad que fijan entre los 30 y 40 céntimos de media por cada palé que carguen o descarguen de su vehículo. En caso contrario, en el que se niegue a abonar cantidad alguna, deberá mover la mercancía con una traspaleta manual con lo que ello supone, en algunos casos 22 toneladas de peso a fuerza bruta.

En algunos centros donde ha de ir el transportista le obligan a lavar los palets tras su descarga, a clasificar la mercancía trasportada, a realizar tareas que no le competen en su periodo de descanso. En muchos incluso, tras ello, no les permiten el acceso a los aseos para que puedan lavarse y proseguir dignamente con su ruta. Además día a día en los centros de trabajo, donde realizan estas tareas los conductores, a estos se les trata con desprecio y falta de respeto. Muchos de ellos han tenido que pasar la noche en vela dentro de su camión, junto a la nave del cliente y en medio de un polígono industrial vacío de presencia humana (con las consecuencias de estar expuesto a los ataques de la delincuencia), hasta la apertura de dicho centro de trabajo, agotados y nerviosos soportan los continuos insultos y faltas a su dignidad por parte de los operarios y responsables mientras se ríen de ellos viéndoles trabajar lo que ellos deberían hacer.

Verdaderas bombas de relojería

En la pirámide con la que podríamos definir el transporte de mercancías por carretera, en lo más alto de la misma, figura el cargador y a continuación los operadores logísticos, les siguen los grandes flotistas y tras ellos las pequeñas agencias de transporte, para pasar a los más perjudicados por esta lacra que aquí denunciamos: los autónomos transportistas y chóferes asalariados y ya, por último, falsos autónomos y trabajadores de otros estados con contratos en precario. Son estos los que las presiones de los que figuran en lo alto de esta pirámide les empujan a realizar las tareas más penosas, entre ellas la carga y descarga del vehículo tras largas horas de conducción. Si te niegas o pierdes al cliente, en caso del autónomo o pierdes tu puesto de trabajo, en el caso del asalariado. La situación de falsos autónomos y trabajadores de otros países (intracomunitarios especialmente) no les permite negarse a realizar estas u otras operaciones que les son encargadas. El dumping social favorece este estado de cosas.

Una vez han realizado dicho sobreesfuerzo parten a la carretera a seguir con la ruta asignada, con excesivo cansancio, falta de atención, estrés, sueño acumulado, etc., siendo un verdadero peligro para todos los usuarios de las vías donde tienen que transitar. Año tras año aumentan los accidentes de tráfico (ya que paradójicamente estos no son considerados accidentes de trabajo) en los que se ven implicados vehículos de transporte, sin investigar que una gran causa de los mismos es ese sobreesfuerzo extra que vienen realizando. La edad de jubilación debería anticiparse si no queremos que se disparen las estadísticas de accidentabilidad, cada vez que el conductor carga o descarga disminuye su capacidad física con los años.

Sin embargo prevalecen los intereses empresariales

Las empresas cargadoras (representadas por sus federaciones AECOC, AEUTRANSMER) y de logística (UNO, entre otras) ven a estos trabajadores ajenos a sus estructuras de negocio como parte del mismo en sus ejercicios de cuentas. El ahorro que les supone a ellos en mano de obra les permite aumentar sus beneficios y, desgraciadamente, eso es lo que importa en esta sociedad cuyos gobernantes solo se preocupan de las economías y no de las personas. Además los empresarios del sector del transporte de mercancías por carretera se ven incapaces de traer la contraria a quienes les facilitan la mercancía con la que ellos han de trabajar. Total, no son ellos quienes tienen que realizar esos esfuerzos, es tarea del transporte de base, es decir, de los porteadores, camioneros y furgoneteros.

Cuando la patronal con más representación en el Comité del Transporte de Mercancías por Carretera (CNTC) negocia las condiciones de los trabajadores del sector ante las fuerzas sociales o los representantes del Ministerio de Fomento no tiene en cuenta al sector base del transporte. De lo único que se acuerdan es de las distintas oportunidades de negocio que podrían perder en caso de que se toque este “charco” del que nadie quiere hablar.

Campaña contra la carga y descarga por los propios camioneros

Campaña contra la carga y descarga por los camioneros Con este panorama y sensibilizados por estos y otros hechos, que deberían tratarse en mayor profundidad por los propios actores del sector del transporte de mercancías por carretera, la emisora Transporte News Radio ha querido implicarse con el sector base del transporte para ayudar a mejorar sus condiciones de trabajo y, en particular, las relativas a su dignidad profesional. Junto con asociaciones de transportistas autónomos, sindicatos, colectivos ciudadanos de familiares y transportistas estamos realizando una campaña para acabar con la actividad de carga/estiba o desestiba/descarga de los camioneros y furgoneteros dejando esta tarea de forma inapelable a los cargadores y destinatarios.

Difundimos desde nuestra emisora el sentir de los conductores, recabamos información de los mismos, proponemos alternativas y todo ello se lo presentamos a los representantes del sector además de junto con ellos coordinar las distintas actividades que de ello deriven. Agradecemos toda la colaboración posible y con este fin proponemos fórmulas para que todos los criterios sirvan a la unidad y dignidad de los trabajadores autónomos y asalariados del transporte de mercancías por carretera.

Apoyos que estamos recibiendo a esta campaña: Uniatramc-UGT, Asociación de autónomos Astrali, CC.OO. Servicios a la ciudadanía (carreteras), UGT-SMC Carreteras, Plataforma del Transporte En Ruta Todos a Una, Upatrans Castilla y León.

En el formulario de contacto de nuestra emisora podéis dejar aquella información de interés que sirva a esta campaña recién iniciada:

http://www.transportenewsradio.com/contacto.html

Agradecemos vuestra colaboración y quedamos a la disposición de cuantas personas y entidades estén dispuestas a colaborar con nosotros.

Fdo: Xavi Navarro – Director de Transporte News Radio