Opinión

Camionero: ¡Demasiado Viejo para Conducir, Demasiado Joven para Abandonar!

Carta de la hija de un camionero a la Directora General de Transporte Terrestre
Un camionero al volante.
Camionero: ¡Demasiado Viejo para Conducir, Demasiado Joven para Abandonar!

Xavi Navarro, opinión, transporte, demasiado, joven, viejo, conducir, abandonar,     Xavi Navarro. Director de Transporte News Radio. www.transportenewsradio.com

Truck Driver: Too Old to Drive, Too Young to Leave! Un juego de palabras con el título de uno de los temas musicales más famosos del grupo Jethro Tull que, por cierto, recomiendo escuchéis.

Todos los seres humanos estamos expuestos a una serie de estímulos que influyen en nuestra salud, tanto física como mental. Cuanto mayor sea esta influencia más difícil es mantener nuestra vitalidad y estabilidad emocional. Pues bien, en la coyuntura actual de los transportistas, bajo presión, estos estímulos hacen mella en su salud y de qué manera. Acelera el envejecimiento de los camioneros machacando su cuerpo y mente antes que a la mayoría de los profesionales de otros sectores.

El límite de edad para que un chofer asalariado pueda jubilarse está en exceso prolongado, comparable al de un oficinista, pudiendo llegar a los 67 años. Para el camionero autónomo la situación no es mejor, ya que para su caso el abandono de la actividad profesional es a los 63 años (modificación hecha con la Orden FOM/64/2017 de 30 de enero, no obstante, para la convocatoria de 2017 la edad mínima se fija en 64), siempre y cuando su maltrecha economía se lo permita, además de cumplir una serie de requisitos exigidos.

Es conocido por una gran parte de la sociedad que los camioneros no son ya esos “turistas pagados” que antaño pensaban los usuarios de las vías al cruzarse con un camión. De hecho, son muchos los intentos por rebajar esos límites de edad de jubilación, ya sea por parte de asociaciones profesionales, sindicatos e incluso movimientos ciudadanos. Sin embargo, están abocados al fracaso, como tantas justas reivindicaciones del sector del transporte habida cuenta la postura del Gobierno que legisla para sus amiguetes: aquellos que necesitan, como todos, que les lleguen los suministros con puntualidad y pulcritud, anteponiendo cualquier emoción ética que no sea la de sus abultados ejercicios económicos.

Y, claro, no hay conductores; no al menos los suficientes. No pueden “permitirse el lujo” de que se jubilen los que hay, ya que la mayoría de los camioneros rebasa los 40 años ¿y por qué no entran jóvenes que los sustituyan? Bueno, eso es harina de otro costal, da para otro artículo, aunque es evidente. Tan solo hay que conocer las duras condiciones de este oficio y lo mal remunerado que está. Pocos son los que se hacen ricos haciendo malabares con la rosca, como se diría en el argot de estos profesionales.

Y en ese estado de cosas al menos los propios interesados en que sigan trabajando esos camioneros deberían hacer un esfuerzo por mejorar sus condiciones laborales. Porque, parece mentira, esos grandes empresarios tratan mejor a los animales que a sus transportistas. ¡Céntrense, señores! Que su avaricia y ansia por acumular petrodólares no les impida ver que van a acabar matando a “su gallina de los huevos de oro”. Sean más inteligentes, al menos, si no pueden ser más humanos: acaben con la carga y descarga de los camiones por los conductores, no intenten prolongar más aún su jornada de trabajo, no les agobien con nuevas imposiciones, apliquen la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, que para eso está.