Un conductor, detenido en la A-2 cuando llevaba a Rumanía casi 2.000 kilos de carpas

Un conductor, detenido en la A-2 cuando llevaba a Rumanía casi 2.000 kilos de carpas

Efectivos de la Guardia Civil han intervenido 1.880 kilos de carpas, no aptas para el consumo humano, cuando eran transportadas a Rumanía. La mercancía era trasladada en una furgoneta que fue localizada en la A-2, a la altura de la localidad zaragozana de El Frasno, y su conductor no pudo acreditar el origen del pescado ni su trazabilidad. Según han informado fuentes de la Guardia Civil, el conductor, detenido por un presunto delito contra la salud pública, residía en Rumanía y se trasladó a España para realizar el transporte de la mercancía, que procedía de Extremadura. Los 1.880 kg de carpas fueron destruidos por considerarse no apta para consumo humano y ser un riesgo para la salud.

Los hechos sucedieron el pasado día 22 de febrero, cuando una patrulla de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Zaragoza que prestaba servicio por la A-2, a la altura de El Frasno, observó una furgoneta estacionada fuera de la vía. Ante la posibilidad de que pudiera necesitar algún tipo de asistencia, los agentes hablaron con el conductor y observaron que el vehículo presentaba evidencias claras de sobrepeso. Los agentes requirieron al conductor que mostrara el interior de la furgoneta y la documentación que amparase la carga, comprobando que portaba gran cantidad de carpas, por lo que solicitaron la presencia del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Zaragoza para determinar si el transporte se realizaba correctamente.

Los miembros del Seprona que se trasladaron al lugar comprobaron que trasladaban carpas comunes (Cyprinus carpio), y que la documentación que les entregó, que no estaba en español, no aclaraba el origen de la carga, ni la fecha del transporte ni otros datos necesarios.

Así, se puso en conocimiento del Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón para solicitar la presencia en el lugar de un inspector de este departamento. El veterinario técnico de salud pública que acudió al lugar comprobó que se desconocía el origen y la trazabilidad de la carga. Por ello se levantó acta y procedió a la inmovilización cautelar de la carga, dando un plazo al responsable de la misma para que acreditase su origen, procedencia y trazabilidad.

Una vez que expiró este plazo sin presentarse la documentación requerida, la inspección de la Zona veterinaria de La Almunia de doña Godina procedió a levantar un acta en la que reflejaba que la mercancía, 1.880 Kg de pescado, era un riesgo para la salud pública y no se consideraba apta para el consumo humano, por lo que debía ser destruida. Destrucción que fue llevada a cabo ese mismo día en un centro gestor autorizado.

Por todo ello, el Equipo de Investigación del Seprona de la Guardia Civil de Zaragoza procedió a la detención del conductor, A. T., un hombre de nacionalidad rumana y 27 años, como presunto autor de un delito contra la salud pública. De la investigación llevada a cabo por los agentes, que se enmarca dentro de la Operación Esparavel, la Guardia Civil logró determinar que el detenido, con residencia en Rumanía, se había trasladado a España para realizar el transporte de la mercancía intervenida, cuya procedencia era Extremadura y su destino final Rumania tras hacer escala en Italia. El detenido y las diligencias instruidas fueron entregados en el Juzgado número 1 de La Almunia de doña Godina.

Fuente: heraldo.es